CUARESMA

LA CUARESMA EN LA IGLESIA ARMENIA
El “Gran Ayuno” o “Medz Bahk” (Մեծ Պահք)


El significado de la palabra “bahk” (պահք) es cuidarse, privarse o abstenerse de algo. En la antigüedad, significaba simplemente ayunar. A quienes eran débiles y no podían mantener el ayuno total, el apóstol San Pablo les permitía comer vegetales (Rom. 14:2), comida parcialmente nutritiva. Este permiso se transformó poco a poco en una costumbre general, y alimentarse con comidas livianas tomó el nombre de “bahk”, que pasó a significar la abstinencia de cierta clase de alimentos. Al principio sólo se permitían vegetales y finalmente también algunos derivados de vegetales, como aceite de oliva, vino, etc.


Etimología
En armenio clásico o krapár, el término “bahk” significa ayuno; en armenio moderno o ashjarhapár, significa abstinencia. Viene de “bahél” (պահել), que es “guardar” u “observar”; con lo que “bahk” etimológicamente significa “observancia”: la observancia del ayuno (en krapár) o de la abstinencia (en ashjarhapár).


El Gran Ayuno
En la Iglesia Armenia, la Cuaresma recibe el nombre de “Medz Bahk” (Մեծ Պահք), que significa “Gran Ayuno” o “Gran Abstinencia”. Es la abstinencia más larga establecida por la Iglesia. Comienza el lunes siguiente al domingo de Carnaval y finaliza el viernes anterior a Semana Santa. De esa manera, son exactamente 40 días, que es precisamente lo significa la palabra Cuaresma. En armenio se utiliza el término “Karasnórt” (Քառասնորդ), que se traduce como "Cuadragésimo", refiriéndose al período de 40 días.


¿Por qué 40 días?
La duración de 40 días proviene de varias referencias bíblicas y simboliza la prueba por la que pasó Jesús al permanecer durante 40 días en el desierto de Judea. También representa los 40 días que duró el diluvio universal, además de los 40 años de la marcha del pueblo israelita por el desierto y las 40 décadas que duró la esclavitud de los judíos en Egipto.


El sentido de la penitencia
En armenio tenemos dos palabras que usamos para explicar en qué consiste la penitencia: "abashavel" quiere decir "regresar de un mal camino" que se tomó, para tomar el buen camino que nos lleva a destino. Ese es también el sentido del término "conversión". La segunda palabra es "abashjarel", que significa "abstenerse de ciertas comidas". Eso era históricamente la ley del tiempo cuaresmal: ayuno, abstinencia. En lenguaje moderno, "abashjarel" es hacer penitencia.


Cortinas cerradas
Una característica llamativa del tiempo de Cuaresma es que las cortinas del altar permanecen cerradas, simbolizando que las puertas del cielo se han cerrado a la humanidad por el pecado de Adán. Incluso la Santa Misa se celebra tras la cortina cerrada y omitiendo ciertos cantos. El domingo de Ramos se abrirán las cortinas, representando que el cielo se ha abierto para que entren en él los pecadores que han hecho penitencia. En algunas iglesias armenias católicas, las cortinas se abren –aunque de manera parcial– al comienzo de la primera parte de la Misa (llamada “Misa de los catecúmenos”) y vuelven a quedar cerradas al finalizar la Misa durante toda la Cuaresma.


Sal y pan
Un término menos usado con el que se conoce a la Cuaresma es “Aghuháts” (Աղուհաց), que literalmente es "sal y pan" (աղ=sal / ու=y / հաց=pan). El término “aghuháts” no solamente se refiere a la Cuaresma, sino que –en otra de sus acepciones– significa “comida de pobre” (cit. de Tekeyan, Pascual, Diccionario Armenio-Español, Buenos Aires, 1984, Ed. Akian, pág. 16), lo cual tiene sentido, ya que esta idea de pobreza es la que permea el espíritu cuaresmal.


Los domingos de Cuaresma
Los domingos de Cuaresma son seis y cada uno lleva un nombre según el tema tratado.
- 1º domingo: «Entrada de Adán en el Paraíso» (Մուտն Ադամայ ի դրախտն)
- 2º domingo: «Domingo de la Expulsión» (Արտաքսման Կիրակի)
- 3º domingo: «Domingo del Hijo Pródigo» (Անառակի Կիրակի)
- 4º domingo: «Domingo del Administrador Infiel» (Տնտեսի Կիրակի)
- 5º domingo: «Domingo del Juez Inicuo» (Անիրաւ Դատաորի Կիրակի)
- 6º domingo: «Domingo de la Venida» (Գալստեան Կիրակի)
Los 2 primeros se refieren a hechos del Antiguo Testamento y los otros 4 al Nuevo Testamento, yendo así desde la Creación hasta la Venida de Cristo al mundo para la Redención, que culmina con la Semana Santa.


El “Pun Pareguentán”
El 1º domingo de Cuaresma también es llamado “Pun Pareguentán” (Բուն Բարեկենդան). La palabra “pareguentán” está compuesta por los vocablos “parí” (buena) y “guentán” (vida), que parece referirse al “buen comer”. Se llama “pareguentán” al último día ferial antes de empezar una abstinencia semanal. La palabra “pun” significa “grande” o “real”. El Pun Pareguentán es el Gran Carnaval, ya que precede al Gran Ayuno. La costumbre de las fiestas y diversiones del día domingo, a pesar del ambiente sobrio de la Iglesia, después de haber cerrado las cortinas de los altares el día sábado y de haber empezado los cánticos y oraciones de la Cuaresma, ha sido interpretada como una representación “de la felicidad del paraíso y la buena vida”. Porque el misterio del “Pun Pareguentán” contiene el recuerdo de la vida feliz de los primeros seres humanos (Adán y Eva) en el paraíso.


El día de las Cenizas
En la Iglesia Armenia Católica existe el Lunes de Cenizas, día que da comienzo a la Cuaresma propiamente dicha y que es el día siguiente al “Pun Pareguentán”. En una ceremonia especial se quema el ramo del olivo que habían guardado del anterior Domingo de Ramos, hasta reducirlo a cenizas. Las bendicen y las imponen sobre las cabezas de los feligreses presentes, como signo de que se reconocen públicamente pecadores y asumen la condición de penitentes públicos, los cuales en la antigüedad permanecían cerca de las puertas de la iglesia y se privaban incluso de recibir la sagrada comunión. En la Iglesia Apostólica Armenia, no existe ni la costumbre ni el nombre de esta celebración. La Iglesia latina lo hace el día miércoles de esa misma semana y por eso lo llama Miércoles de Cenizas. En los países donde predomina el rito latino, la Iglesia Armenia Católica traslada la ceremonia de bendición e imposición de las cenizas a ese mismo miércoles.


Interrupción del ayuno
El único día en el que se interrumpe el ayuno de Cuaresma y se abren las cortinas de la Iglesia es el 25 de marzo, por ser la fiesta de la Anunciación a la Madre de Dios. La Iglesia eligió esta fecha para celebrar el momento en que María acepta ser la Madre de Dios, por ser exactamente 9 meses antes (es decir, el tiempo de un embarazo) del nacimiento del Salvador. El hecho de ser un día importante y lleno de gozo para la Iglesia amerita la interrupción del ayuno.


¿Cómo vivir el «Gran Ayuno» hoy?
Las exigencias y ritmos de vida actuales hacen que sea muy difícil –o casi imposible– llevar a cabo un ayuno al estilo de lo que se hacía varios siglos atrás. Tampoco la Iglesia nos pide eso hoy. El espíritu del ayuno va más allá de la privación estricta de ciertas comidas y bebidas. Podemos "ayunar" de diferentes cosas, que –si bien son legítimas– pueden ser perjudiciales en exceso. Por lo tanto, ejercitar las privaciones fortalece nuestra voluntad para vencer el apego a esos bienes, y nos termina resultando saludable. Por ejemplo: privarnos de algún lujo o de algo que nos gusta, mirar menos televisión, pasar menos horas frente a la computadora o el celular, etc. Cada uno sabrá qué cosa está a su alcance. No se trata de hacer grandes sacrificios sino de hacer algo, por pequeño que sea, y dedicar ese dinero o tiempo ahorrados para rezar una oración o hacer alguna obra buena.