LA BIBLIA EN EL RITO ARMENIO

LA BIBLIA
en el rito armenio


La Palabra de Dios juega un rol muy importante en nuestras vidas, porque es el alimento espiritual que el cristiano necesita diariamente. En esta sección, vamos a ocuparnos específicamente de la importancia de la Biblia en el rito armenio.


📖 Biblia en armenio
En armenio, la palabra Biblia se expresa con un término muy específico, Աստւածաշունչ (Asdvadzashúnch), que viene de:
* Աստուած (Asdvádz) = Dios.
* շունչ (shunch) = soplo, aliento, inspiración.
Por lo tanto, literalmente “Biblia” quiere decir “soplo de Dios”, aludiendo a que la Sagrada Escritura fue escrita justamente por inspiración divina.


Te invitamos a escuchar la charla titulada “La Biblia en el rito armenio”, dictada por el prof. Víctor Basterretche el viernes 25 de septiembre de 2015:

(Si no aparece el reproductor de audio o no podés escucharlo, hacé click aquí)


Asimismo, podés descargarte el 🗓️ Calendario Litúrgico Armenio, donde vas a encontrar detalladamente los nombres de cada una de las festividades, las lecturas, salmos y evangelios de cada día del año. Por otra parte, si querés leer el Evangelio del día de hoy en idioma armenio, te recomendamos entrar a la siguiente página web: https://aroriaavedarane.org. Ahí podrás suscribirte para que te llegue el Evangelio de cada día a tu correo electrónico.


La costumbre de besar el Evangelio
En nuestro rito armenio, durante el canto del Trisagio o “Santo Dios” (Surp Asdvádz), algunos fieles se acercan a besar el Evangelio y, luego de besarlo, apoyan la frente sobre el mismo. Conocé más acerca de esta costumbre, haciendo 👉 click aquí.


Armenia en la Biblia
El Monte Ararat (Արարատ) se encuentra en el territorio de la Armenia histórica (actualmente Turquía). Según la tradición cristiana, en este monte fue donde se detuvo el Arca de Noé después del diluvio universal (Gén. 8, 4). El Ararat es un símbolo omnipresente en la actual Armenia. Aparece en el escudo nacional y no hay casa que no tenga una foto, cuadro o grabado con la silueta del monte. La pérdida de su monte sagrado es aún hoy motivo de nostalgia y melancolía para los armenios.