SAN BLAS
Սուրբ Վլաս
(s. III – h. 316)
Era doctor de medicina. Después se ordenó sacerdote: por su vida ejemplar, fue elegido obispo de Sebaste, su ciudad natal –actual Sivas–, en Armenia. En toda Asia Menor se hablaba de Blas, el varón santo, el obispo que realizaba milagros y animaba a los mártires visitándolos en sus cárceles en la época de las persecuciones de Diocleciano. Y ante la evidencia de su santidad, muchos paganos se convirtieron. Cuando llegó la última y más cruel persecución del Imperio Romano contra el cristianismo, en tiempos de Liciano, San Blas exhortó a los cristianos a alejarse de las ciudades. También él se dedicó a la vida de anacoreta en los montes. Los animales silvestres lo visitaban y él los curaba de sus heridas.
Hacia 315, Agrícola, gobernador de Capadocia y Armenia Menor, llegó a Sebaste con orden de exterminar a los cristianos. Enterado de la existencia de Blas, envió soldados para prender al obispo y a los cristianos ocultos en aquellos montes. Los fieles lloraban. Ante esta peregrinación que se dirigía hacia el lugar del martirio, apareció suplicante una madre con su hijo que agonizaba por habérsele atravesado en la garganta una espina de pescado. Blas signó la garganta con la señal de la cruz, oró, y el joven volvió a estar sano y salvo.
Entregado para el juicio, San Blas reprochó con energía a los jueces sus injusticias y sus crueldades. Fue condenado a un azotamiento cruel y trasladado sangrando a la cárcel. Siete mujeres piadosas se ungían con la sangre que derramaba de sus heridas, la que las protegía de las torturas de fuego a las cuales las sometían. Interrogado por segunda vez, contestó con más energía que la primera. Arrojado al lago de Sebaste, salió indemne. Fue decapitado en 316 el 3 de febrero, se cree que del año 316.
📕 Martirologio Romano:
“San Blas, obispo y mártir, que, por ser cristiano, padeció en tiempo del emperador Licinio en la ciudad de Sebaste, en Armenia (c. 320)”.
Bendición de las Gargantas
El culto a San Blas llegó a ser muy popular en Occidente, invocándoselo especialmente contra los males de la garganta. Por eso, en muchas iglesias se bendicen pan y comestibles en su fiesta (el 3 de febrero, en Occidente). También se imparte la Bendición de las Gargantas o "Bendición de San Blas". Para esta bendición se unen dos velas previamente bendecidas y atadas con un cordón rojo, formando una cruz, que se coloca sobre la garganta de la persona a la que se bendice, mientras se le dice “por intercesión de san Blas te libere Dios de todo mal de la garganta y de todo otro mal”.
Reliquias de San Blas
En nuestra catedral, tenemos las reliquias de San Blas, que veneramos todos los 3 de febrero cuando hacemos la Bendición de las Gargantas.
📅 Festividad
En el calendario armenio, se celebra la festividad de "San Blas, obispo, y Onésimo, discípulo del apóstol Pablo", pero es el 4º lunes del tiempo de la Teofanía, aunque no siempre este período litúrgico llega a tener 4 semanas, ya que lo cual depende de la fecha de la Pascua. En tal caso, se traslada la festividad a otro momento del año, pero esto es muy variable de acuerdo al calendario litúrgico de cada año. En los países de Occidente, la fecha es siempre el 3 de febrero.