Միածին Որդի
Միածին Որդի եւ Բանդ Աստուած եւ անմահ էութիւն, որ յանձն առեր մարմնանալ ի սրբուհւոյ Աստուածածնէն եւ ի միշտ Կուսէն, անփոփոխելիդ մարդ եղեալ խաչեցար, Քրիստոս Աստուած, մահուամբ զմահ կոխեցեր, մինդ ի սրբոյ Երրորդութենէն, փառաւորակից ընդ Հօր եւ սրբոյ Հոգւոյն, կեցո' զմեզ:
Miadzín Vortí
Miadzín Vortí iév Pánt Asdvádz, iév anmáh eutiún; vor hántzn arér marmnanál i sêrpuhvó Asdvadzadznén iév i mishd gusén; anpopojelít márt ieghiál jachetsár Krisdós Asdvádz, mahvámp êzmáh gojetsér; mínt i sêrpó Ierrortutenén paravoraguíts ênt Hor iév ênt sêrpó Hokvúin, guetsó êzméz.
Oh Hijo unigénito
Oh Hijo unigénito, Verbo de Dios y Ser inmortal, que aceptaste encarnarte de la santa Madre de Dios y siempre virgen, sin sufrir cambio alguno te hiciste hombre y fuiste crucificado, oh Cristo Dios, con tu muerte pisoteaste a la muerte. Tú que eres uno de la Santa Trinidad, conglorificado con el Padre y el Espíritu Santo, sálvanos.
Լուսով Աստուածութեան
Տէր թագաւորեաց, վայելչութիւն զգեցաւ:
Լուսով Աստուածութեան քո, Քրիստոս, լուսաւորեցեր սուրբ զԵկեղեցի. պահեա զսա անշարժ յաւիտեան:
Տօնէ այսօր Երուսաղէմ հաւատացելոց բազմութեամբ զնաւակատիս սուրբ Եկեղեցւոյ. պահեա զսա անշարժ յաւիտեան:
Փառք Հօր † եւ Որդւոյ եւ Հոգւոյն սրբոյ՝ այժմ եւ միշտ եւ յաւիտեանս յաւիտենից. ամէն:
Բացան դրունք հաւատոյ նոր Սիոնի՝ ընդունել զանմահ Փեսայդ յառագաստ. բաշխէ զմարմին Քո եւ զարիւն. պահեա զսա անշարժ յաւիտեան:
Lusóv Asdvadzutián
Der takavoriáts, vaielchutiún êzketsáv.
Lusóv Asdvadzutián ko, Krisdós, lusavoretsér surp zEgueghetsí; bahiá êzsá ansháryê havidián.
Doné aisór Ierusaghém havadatselóts pazmutiámp êznavagadís surp Iegueghetsvó; bahiá êzsá ansháryê havidián.
Park Hor † iev Vortvó iev Hokvúin sêrpó, áiyêm iev mishd iev havidiáns havideníts; amén.
Patsán trúnêk havadó nor Siovní êntuníl zanmáh pesáis harakásd, pashjé zmarmín ko iév zariún; bahiá êzsá ansháryê havidián.
Con la luz de tu divinidad
El Señor reinó, se vistió de majestad.
Con la luz de tu divinidad, oh Cristo, iluminaste a la santa Iglesia; consérvala inconmovible eternamente.
Festeja hoy Jerusalén con la multitud de los creyentes la dedicación de la santa Iglesia; consérvala inconmovible eternamente.
Gloria al Padre † y al Hijo y al Espíritu Santo, ahora y siempre y por los siglos de los siglos; amén.
Se abrieron las puertas de la fe de la nueva Sión para recibirte, oh inmortal Esposo, en el lecho nupcial; ella distribuye tu Cuerpo y tu Sangre; consérvala inconmovible eternamente.
որ յարեար ի մեռելոց
Սուրբ Աստուած, սուրբ եւ հզօր, սուրբ եւ անմահ, որ յարեար ի մեռելոց, ողորմեա մեզ։ (երիցս)
vor hariár i merelóts
Surp Asdvádz, surp iév hêzór, súrp iév anmáh, vor hariár i merelóts, voghormiá mez. (ierítss)
que resucitaste de entre los muertos
Santo Dios, santo y fuerte, santo e inmortal, que resucitaste de entre los muertos, ten piedad de nosotros. (3 veces)
Սաղմոս ԿԴ, 1-3 [2-4]
Քեզ վայելէ օրհնութիւն, Աստուած, ի Սիովն, եւ քեզ տացին աղօթք յԵրուսաղէմ: Լուր աղօթից իմոց, զի առ քեզ ամենայն մարմին եկեսցէ: Բանք անօրինաց զօրացան ի վերայ մեր. զամպարշտութիւնս մեր դու քաւեսցես:
Saghmós 64, 1-3 [2-4]
Kez vaielé orhnutiún, Asdvádz, i Sióvn, iev kez datsín aghotk, hErusaghém. Lur aghotíts imóts, zi ar kez amenáin marmín ieguestsé. Pank anorináts zoratsán i verá mer, zambarshdutiúns mer tu kavestsés.
Salmo 64, 1-3 [2-4]
A ti, Señor, te corresponde un canto de alabanza en Sión, y todos tienen que cumplir sus votos, porque tú escuchas las plegarias. A ti acuden todos los hombres bajo el peso de sus culpas; nuestras faltas nos abruman, pero tú las perdonas.
Por lo tanto, ya no hay condenación para aquellos que viven unidos a Cristo Jesús. Porque la ley del Espíritu, que da la Vida, te ha librado, en Cristo Jesús, de la ley del pecado y de la muerte. Lo que no podía hacer la Ley, reducida a la impotencia por la carne, Dios lo hizo, enviando a su propio Hijo, en una carne semejante a la del pecado, y como víctima por el pecado. Así él condenó el pecado en la carne, para que la justicia de la Ley se cumpliera en nosotros, que ya no vivimos conforme a la carne sino al espíritu.
En efecto, los que viven según la carne desean lo que es carnal; en cambio, los que viven según el espíritu, desean lo que es espiritual. Ahora bien, los deseos de la carne conducen a la muerte, pero los deseos del espíritu conducen a la vida y a la paz, porque los deseos de la carne se oponen a Dios, ya que no se someten a su Ley, ni pueden hacerlo. Por eso, los que viven de acuerdo con la carne no pueden agradar a Dios.
Pero ustedes no están animados por la carne sino por el espíritu, dado que el Espíritu de Dios habita en ustedes. El que no tiene el Espíritu de Cristo no puede ser de Cristo. Pero si Cristo vive en ustedes, aunque el cuerpo esté sometido a la muerte a causa del pecado, el espíritu vive a causa de la justicia. Y si el Espíritu de aquel que resucitó a Jesús habita en ustedes, el que resucitó a Cristo Jesús también dará vida a sus cuerpos mortales, por medio del mismo Espíritu que habita en ustedes.
Սաղմոս ԿԵ, 4 [5]
Ալելուիա, ալելուիա:
Եկայք եւ տեսէք զգործս Աստուծոյ, որպէս զի ահեղ են խորհրդով քան զամենայն որդւոց մարդկան:
Ալելուիա:
Saghmós 65, 4 [5]
¡Aleluiá, aleluiá!
Iegáik iev desék êzkórdzês Asdudzó, vorbés zi ahégh ien jorhêrtóv kan zamenáin vortvóts martgán.
¡Aleluiá!
Salmo 65, 4 [5]
¡Aleluya, aleluya!
Vengan a ver las obras del Señor, las cosas admirables que hizo por los hombres.
¡Aleluya!
El día del Juicio, los hombres de Nínive se levantarán contra esta generación y la condenarán, porque ellos se convirtieron por la predicación de Jonás, y aquí hay alguien que es más que Jonás. El día del Juicio, la Reina del Sur se levantará contra esta generación y la condenará, porque ella vino de los confines de la tierra para escuchar la sabiduría de Salomón, y aquí hay alguien que es más que Salomón.
Cuando el espíritu impuro sale de un hombre, vaga por lugares desiertos en busca de reposo, y al no encontrarlo, piensa: ‘Volveré a mi casa, de donde salí’. Cuando llega, la encuentra vacía, barrida y ordenada. Entonces va a buscar a otros siete espíritus peores que él; vienen y se instalan allí. Y al final, ese hombre se encuentra peor que al principio. Así sucederá con esta generación malvada».
Հրեշտակային
Հրեշտակային կարգաւորութեամբ լցեր Աստուած զքո սուրբ զեկեղեցի: Հազարք հազարաց հրեշտակապետք կան առաջի քո, և բիւրք բիւրոց հրեշտակք պաշտեն զքեզ Տէր: Եւ ի մարդկանէ հաճեցար ընդունել զօրհնութիւնս ձայնիւ խորհրդականաւ, սուրբ, սուրբ, սուրբ, Տէր զօրութեանց:
Hreshdagaín
Hreshdagaín garkavorutiámp lêtsér Asdvádz êzko surp zegueghetsí. Hazárk hazaráts hreshdagabédêk gan arrachí ko, iev piurk piuróts hreshdáguêk bashdén êzkéz Der. Iev i martgané hadyetsár êntunél zorhnutiúnês tzainív jorhêrtaganáv, surp, surp, surp, Der zorutiánts.
Con órdenes angélicos
Con órdenes angélicos colmaste, oh Dios, a tu santa Iglesia. Miles de miles de arcángeles están delante de Ti, y millares de millares de ángeles te sirven, Señor. Y tuviste a bien aceptar de los hombres alabanzas con mística voz: santo, santo, santo es el Señor de los ejércitos.